¿Cuántas veces has conocido a alguien interesantíiisimo y te has quedado con la boquita abierta porque no tenías tarjetas para darle?
Sí, ahora tooodos vamos con el móvil a todas partes, pero, ¿alguien sabe quién son TODOS esos contactos que tiene en su propia agenda?
Por raro, raro que parezca, a veces tenemos números que no sabemos de dónde han salido (o es que se reproducen por generación espontánea en nuestro teléfono). Y sí, sí, es así, te darías cuenta si algún día tuvieses que copiar a mano tu lista interminable de contactos ¡y eso sin hablar de los ligues de verano!
Por eso, nosotros queremos retomar una costumbre que, sin duda, puede causar una bonita impresión: las tarjetas de visita.
Pero ya que nos ponemos a retomar viejas costumbres, vamos a hacerlo requetebien y dejar el pabellón muy alto, para que ese bendito que se lleve un recuerdo nuestro en papel, se acuerde de nosotros para lo restos de los restos.
Vale, quizás no haga falta que el día de su boda nos dedique unas palabras de lo impresionado que quedó, pero sí es muy muy importante que se acuerde de nosotros cuando tenga una oportunidad en la que encajemos a la perfección. Y entonces, voilà! Ahí estará nuestra tarjeta, impresionante, bonita, reluciente… En su cartera y tacháaaaan ¡nos podrá llamar!
Así que ahora, dedícate unos minutillos (horas, días o la vida entera si hace falta) a pensar qué es eso que tan bien haces y te gustaría destacar en tu tarjeta (esa pequeña cartita de presentación que regalamos solo a unos poco elegidos).
Dale al coco, sé original, creativo y, sobre todo, haz algo que te represente la mar de bien y tenga sentido con el trabajo de tus sueños.
Hay un montón de posibilidades para ser original, puedes sorprender con una forma de tarjeta que no sea la típica rectancular, usando tipografías bonitas, ilustraciones, acuarelas, usa troqueladoras para darles forma… Conceptos chulos que te identifiquen (pero un consejillo, no te pases de grande que si no cabe en su cartera gua guaaa guaaaa, ¡tienes menos posibilidades de que la guarde!)
Mira estos ejemplos qué chulísimos son:
Usar iconitos e imágenes con tus habilidades es supervisual, divertido y queda genial.
También es muy llamativo hacerse una ilustración personalizada, así seguro, seguro, que te recuerdan cuando vean tu tarjeta.
¿Que eres ilustrador y eso es lo que mejor haces? Pues déjalo bien clarito, los creativos y artistazos lo tenéis muy fácil.
Aunque para tener una tarjeta bonita a veces basta con un diseño chulo y sencillo.
Pero si quieres puedes arriesgar y salirte con formatos como el de esta tarjeta, capaz de transformarse en un conejito.
Los algodoncillos para limpiarse la cara inspiraron muy mucho a esta dermatóloga y, oye, le quedó genial ¿sería en un día de resaca con los ojos de panda?
Pero si ahora mismo estás pensando que esto es demasiado carete para tí ¡stop! que para algo tienes un par de manos, y puedes utilizarla para personalizar tarjetas más sencillas y que te queden de escándalo.
Pon una nota de color a los cantos ya sea con spray, pintura o rotuladores y mira cómo cambian.
Es una opción fácil que ya dirá mucho de ti y quedará muy clarito que eres un detallista de película.
Y para que veáis que la imaginación de muchas personitas es brutal, mirad cuanto arte hay en estas tarjetas ¡woooow!
Ala, que necesitas que te dejen la casa vacía, pues aquí no dejan ni rastro.
¿Eres buenísimo escribiendo? Pues ya sabes que una imagen (también) vale más que mil palabras.
Utiliza materiales que sorprendan, ¡como el corcho!
Seguro que cuando encuentres en tu bolso un trozo de salami como este, te acordarás de tu charcutería favorita (y ese jamoncito que tanto te gusta)
¡Práctica! Esta tarjeta de una tienda de bicis seguro que te la guardas ¿a que sí?
Pues a darle al coco y pensar cositas chulas que te definan, eso que cuando la veas pienses ¡así soy yo!
How many times have you met someone really interesting and been horrified to find you don’t have a card to give them?
I know, we all carry our phones everywhere but who really knows who ALL those contacts are?
Strange as it may seem, sometimes we do not know where some numbers come from (perhaps they spontaneously generate on our phones). You would certainly realize if one day you copied out your endless list of contacts by hand. Not to mention those late-night romantic number swaps you have forgotten about!
So we want to go back to a custom that can give a wonderful impression: business cards. Take a look at some of these examples!
Combien de fois tu as rencontré une personne super intéressante et tu es restée bouche bée car tu n’avais pas de carte de visite à lui donner?
De nos jours, on prend le téléphone partout avec nous mais avec tous les contacts que l’on a dans notre agenda, on s’y perd!
Aussi surprenant que cela puisse paraître, on a parfois des numéros et on ne sait pas d’où ils viennent. Et oui! Tu t’en rendrais compte si un jour tu devrais copier à la main ta liste de contacts interminable sans parler des doublons.
Pour toutes ces raisons, on a envie de reprendre une habitude qui peut laisser une bonne impression: les cartes de visite, regarde les exemples!
Laura dice
Alguna empresa española que se dedique a diseñar o imprimir este tipo de tarjetas? Sólo encuentro empresas americanas 🙁
El Calotipo dice
Hola Laura, nosotros desde El Calotipo podemos ayudarte, puedes ver nuestra web: http://www.elcalotipo.com/ y nos cuentas si necesitas un presupuesto.
Un saludo y gracias a Muy Molón por sacar nuestras tarjetas! 😉
miplumier.com dice
Súper originales!
http://www.miplumier.com
John Mendoza dice
Hola, en abcimprenta.com somo especilistas en la impresion de las tarjetas troqueladas con forma personalizada, visita nuestra web y consulta precios…